LA INFLUENCIA DE LOS “PROGRAMA BASURA” EN EL
COMPORTAMIENTO DE LOS NIÑOS
Instituto Universitario Carl Rogers
MITZI
MARICRUZ MONDRAGÓN CARRERA
Licenciatura en Psicología
Introducción
Los psicólogos estudiamos y analizamos
como los medios de comunicación influyen
en comportamientos y actitudes de los
seres, ya que los medios hacen que la gente cambie muchas cosas de su personalidad.
Por
mucho tiempo la televisión ha sido, es y es posible que siga siendo una
compañera de tiempo durante el crecimiento y educación de los niños. Los
programas nos dan modelos de vida, personalidad, comportamiento, de la moda, entre otras cosas.
Wagner (1980) menciona
que la televisión ha sido apodada “El flautista de Hamelin electrónico”,
porque: “…parece ser apropiado cuando se considera que los niños pasan la sexta
parte de su tiempo mirando televisión entre su nacimiento y los 18 años de
edad” (p.1. La traducción pertenece a Mabel Condemarín de Journal of Reading). Esto
puede ser una realidad, y una metáfora muy interesante, la tv es el flautista que encanta a los niños y hace
que pasen su tiempo libre frente a ellos, además alejan a los niños de otras
actividadesfísicas o de intelecto como la lectura.
Sánchez (2005) habla
de la violencia en la tv, dice que: “…la violencia en
televisión no sirve como explicación directa y general de los comportamientos
agresivos de las personas” (p. 4). La violencia no sirve para nada, no resuelve
nada y aun así la ponen en mayor proporción que otras cosas. (En otras cosas,
podrían ser los valores por ejemplo).
Sánchez
(2005) menciona los daños que provoca la tv, dice que: “…la televisión está
ejerciendo una acción muy nociva sobre el desarrollo de la voluntad y la
imaginación en los niños y los jóvenes, sufriendo las consecuencia la
creatividad resultante de aplicar la voluntad a la imaginación” (p. 6). La tv
podría tener la capacidad de cambiar la forma de ver el mundo de la gente, hace
que cambien su forma de ser, de pensar y actuar, además de que les quita la
capacidad de imaginación a los niños. Yo creo que con todo el avance que ha
habido en los últimos años, la calidad de imagen y las cosas nuevas que salen
día a día, hace que se conviertan en moda, y lo cual hace que la gente quiera
seguir esa moda para poder encajar en el mundo, y si se sigue así pronto
tendremos personas materialistas y falsas.
Empieza la problemática
· ¿Cuáles
son los “programas basura”?
· ¿Qué
características tienen los programas para que sean de interés para los niños?
· ¿Qué
rasgos de personalidad tienen los personajes?
· ¿Cuál
o cuáles serían los motivos para ver dichos programas?
Estas
preguntas ayudarán a dejar claro lo que se quiere saber y eso es lo que esta
investigación está buscando y aclarará posibles dudas más adelante.
Es importante hacer hipótesis sobre estas
preguntas base.
Una
hipótesis, es que, los niños con la necesidad de escapar de alguna situación de
crisis dentro o fuera de la familia, buscan consuelo o apoyo de sus programas
preferidos, buscando una forma de resolver o evadir la crisis o la situación
por la que pasan.
Otra
hipótesis es que, los niños suelen ver mucha “programación basura” y en estos
programas los niños ven en sus programas favoritos a personas fuertes,
valientes y que actúan de una manera “genial” según ellos.
Y
es por eso, que los niños imitan a estos personajes para obtener la admiración
o aceptación de sus compañeros (tanto en el discurso como en las acciones).
Se
deben analizar las características del o los personajes que llegan a ser
imitados por los niños, para saber que tan buenos o malos son los modelos que
son estos personajes para ellos.
Estudiar
el comportamiento de los niños que son influenciados por la televisión puede
apoyar a los padres y maestros a manejar de la mejor manera estas situaciones.
Encontrar
maneras de cambiar el comportamiento y buscar el verdadero origen del porqué de
este tipo de comportamiento de los niños.
Juguemos al espejo
Sería conveniente mencionar a Jean
Piaget, ya que Piaget es uno de los investigadores centrados en el desarrollo
del niño durante sus primeros años de vida, y hay que tomarlo muy en cuenta
para esta investigación, por los estudios que realizó sobre el juego de
imitación, la conducta del niño, la capacidad intelectual del niño, entre otras
cosas más.
Piaget (1959) comenta que el llamado
“juego de imitación”, es: “…objeto significante, es el propio cuerpo, pero no
hay en esto otra cosa que una diferencia de instrumento y como le hemos visto,
hay imitación en todo juego simbólico” (p. 382). Con esto, puede entenderse que
el juego de imitación es un proceso para aprender nuevas cosas.
Lo que es captado como modelo para el
niño, termina siendo algo que se requiere imitar, los niños suelen imitar la
mayor parte de lo que ven, y así es como los niños aprenden a hablar, a comer a
caminar y cualquier otra actividad que vea que hacen los padres o las personas
que los cuidan. Esto siempre influirá en su manera de vivir, la manera en que
se cuida y cría un niño es la manera en que lo enviaran al mundo para hacer
alguien de bien, alguien de cambio.
Es entonces que al pasar el tiempo
desarrolla una personalidad y una conducta, Piaget (1967) habla de la conducta
del niño, dice que: >>Una conducta constituye, pues, un caso, particular
de intercambio entre el mundo exterior y el sujeto<<. Quiere decir que un
niño expresa lo que siente de la manera que él cree que es la mejor” (p. 4).
Esto da a entender que la conducta del niño puede estar influenciada por el
ambiente en el que se desarrolla, busca adaptación o bien, supervivencia. La
vida real puede llegar a ser muy dura, y lo que la televisión muestra, puede
considerarse una guía; algo en que basarnos para saber cómo debíamos actuar en
este mundo contemporáneo, pero hay mencionar también que las enseñanzas que se les brinde también
tienen que ver con el comportamiento de los niños a lo largo de su vida y donde
quiera que estén, un niño bien educado
cabe donde sea.
La
televisión como nana
También debe quedar claro que no se pude
cuidar ni estar todo el tiempo con los pequeños, entonces se dejan a cargo de
la “nana mágica” la televisión, se hace uso de este aparato para mantener al
niño ocupado mientras la madre hace los deberes del hogar o cuando ambos padres
salen a trabajar y es en ese momento donde la televisión posiblemente eche a la
basura lo que se le ha enseñado al niño, hay muchas cosas que ver y los niños lo
saben, buscan y buscan hasta encontrar un programa que les llame la atención y
los mantenga ocupados.
Desafortunadamente,
hay programas con modelos que es preferible no seguir, pero los niños, que son
los que más tiempo pasan frente a la televisión no saben distinguir del todo
bien lo bueno y lo malo y la violencia que muchos programas tienen o su
contenido subliminal. Los padres no suelen poner mucha atención en los
programas que ven los hijos y tampoco les dan la importancia que debería ser,
no les explican lo que es bueno y malo.
Aquí
sería conveniente abrir un gran paréntesis, ya que debe quedar claro que todas
las personas tienen una definición diferente de lo que es bueno y malo: y todo
depende del contexto en el que crecieron las personas y la forma de crianza.
Esto es importante de mencionar porque al momento de que los padres pregunten ¿Qué programa es bueno que vea mi hijo?,
no se podría dar una respuesta convincente
para los padres, ya que si se le sugiere un programa que se considera bueno a criterio de uno, a él no le parece
bien.
Así
que, este pequeño apartado es para que los padres de familia; en vez de
preguntar que programas se recomiendan para su hijo, me atreveré a decirles, ¿y
porque no preguntan mejor por una actividad o algo que puedan hacer con su hijo?
Últimamente
en la mayoría de los hogares, ambos padres trabajan, entonces dejan a los niños
con algún tío, con los hermanos mayores o solos completamente. Entonces los
niños prenden la televisión para no sentirse solos mientras los padres llegan a
su casa a las 6,7 u 8 de la noche (quizás hasta más tiempo). Es entendible que
los padres trabajen duro todos los días, y que llegan muy cansados a casa.
Pero
de eso a que no les den ni un minuto de su tiempo a sus hijos para saber qué
pasa con ellos, que no puedan ir a juntas o reuniones para ayudar en el
rendimiento escolar de los niños, eso de verdad ya es falta de interés por el
bienestar de los niños.
Hay
que dejar en claro que los programas de moda no enseñan nada a los niños, o los
programas cuyo contenido no es el adecuado para ellos, suelen ser los que mayor
atracción tienen para ellos. Las series policiacas que siempre (en su mayoría)
contienen asesinos a sangre fría, que suelen ser animados pero con contenido
violento. Y pregunta, ¿Quién deja que su hijo vea programas de narcos, policías
y demás programas de contenido adulto con los padres o solos? Pero eso ya es
criterio de cada quien.
Aquí
podría considerar las consecuencias de que los niños vean estos tipos de
programas. Pero no solo este tipo de programas, también en las caricaturas o
series que llegan a salir al aire influyen en el comportamiento de los
niños.Dichos programas suelen resultar no aptos para ellos, ya que pueden tener
contenido violento, lenguaje agresivo y/o contenido sexual, o con doble sentido
que a veces no es captado por la mente infantil.
Los
niños, al ver los programas con contenido violento y /o sexual, y al notar que
no hay consecuencias por dicho comportamiento y que los “problemas” se
“resuelven”, optan por imitar las acciones que el personaje uso y “resolver”
sus problemas de la misma forma y salir intactos de la situación. Los
comportamientos que copian los niños de las caricaturas suelen darse porque los
padres no dan apoyo, afecto, la forma de crianza de los padres, el reconocimiento
a los hijos, etc. y por falta de estos crecen “insensibles”.
Holtzman
Wayne H. y Reyes-Lagunes Isabel
(1983) hablan del lenguaje que utilizan la tv, dicen que:
…La
televisión utiliza un “lenguaje” o sistema de símbolos que difiere en muchos
aspectos importantes del utilizado en los libros, el lenguaje hablado o incluso
las películas. Tal lenguaje se dirige a los niveles mis concretos de las
estructuras cognitivas de un individuo (p.6). Se puede entender que cada
programa de tv y cada libro tiene un código que solo aquellos que vean el
programa o lean el libro podrán entender las referencias que se hagan al
respecto.
Esto
podría considerarse un problema a largo plazo, ya que la observación de los
programas para adultos podría ocasionar que los niños imiten lo mismo y
ocasionar daños a propiedad, terceros o a ellos mismos por querer hacer lo
mismo que se vio en el programa o la película. Y el que los niños vean las telenovelas
puede ocasionar que dramaticen o exageren mucho las cosas a las que se
enfrentan (castigos, regaños, etc.) y provocar desesperación en los adultos.
Burgos
(2003) señala que la violencia es una forma de conducta que está inspirada por
diversos móviles., expone que: “…existe una marcada interrelación entre los
factores individuales y el medio ambiente, para que se desarrolle un
comportamiento violento, o para que se geste una personalidad violenta” (p. 3).
Un niño no es violento o agresivo solo porque sí, siempre hay un motivo u
origen que impulsen al niño a cometer actos violentos.
En este
caso, los programas para adultos y las películas violentas (las cuales suelen
contener: acción, terror, suspenso, etc.) que el niño ve sin supervisión de un
adulto; regularmente la reacción de algunos padres es castigar o regañar al
niño ya que son materiales indebido para él, es más la palabra indebido, nos da
a entender que es prohibido y por eso se le regaña, pero, ¿Por qué debería ser
regañado por esto? Si son los padres los que lo pusieron ahí en primer lugar,
le dieron el control sobre lo que puede ver y lo continuará viendo las veces
que quiera, el tiempo que quiera y es de ahí que empieza a imitar conductas.
Una razón por la cual la televisión tiene cierta influencia en los
niños y en las niñas, según Salomón y Gardner (citado por Cebrián, 1992) se
debe a: “… su gran similitud física con los hechos reales que representa. De
ahí que, incluso, frente a los libros, los más pequeños consideran estos
últimos como menos reales” (p. 5). Con esto se entiende que los niños prefieran
la tv y no los libros, ya que últimamente los niños prefieren ver tv y evitar
usar su imaginación al leer los libros.
La
televisión tiene sus pros y contras, claro está, pero si hablamos de la
relación que se tiene entre la tv y las personas que la ven, Sandoval (2006)
menciona la relación de la tv con la idea del “mundo ideal”, dice que: “…la
televisión está relacionada de manera casual con la forma como los individuos
analizan el mundo y lo que esperan de él” (p.11). La tv nos da muchas ideas de
cómo debe ser el mundo y nos idealizamos de manera errónea esa vida que con
mucho esfuerzo se puede hacer, pero mientras tanto, seguiremos guiándonos por
lo que nos muestre la tv.
Las
cadenas de televisión y las personas que se encargan del contenido que
transmiten sus programas, enfatizan la violencia en todos sus niveles, como las
telenovelas, por ejemplo, que tratan de mostrar al mundo como es la vida en el
exterior, el “mundo ideal”, el mundo donde todos quisieran vivir.
En el
caso de los niños, los programas muestran superhéroes con poderes increíbles
que usando violencia o armas de fuego ganan la pelea y encierran a los malos, y
es lo que los niños suelen imitar, juegan a ser su superhéroe favorito y vencer
a los malos, juegan con armas de juguete u otro objeto que pueda servir para
herir a los otros aunque sea considerado un juego por el/los niños.
Aldea
Muñoz (2004) menciona una de las posibles razones por las que los niños ven la
tv, dice que: “…los niños recurren a la televisión para satisfacer sus
necesidades de distracción, reducir las tensiones y como medio para obtener
información” (p. 5). La televisión es una gran distractora y compañera,
acompaña a las personas en momentos de soledad y estrés. Pero a pesar de que se
considera una compañía fiel, no se debe abusar de eso.
Piaget aparece de nuevo; ya que él podría explicar el interés de
los niños por la violencia. Entonces; para Piaget (1967) habla de los intereses
del niño para ver tv, dice que: “…los intereses de un niño
dependerán, pues, en cada momento del conjunto de las nociones que haya
adquirido, así como de sus disposiciones afectivas, puesto que dichos intereses
tienden a completarlas en el sentido de un mejor equilibrio” (p.18). Entiendo
esto, que los niños tendrán gustos diferentes dependiendo del contexto en el
que vivan.
También
hay que considerar que debido a que los niños no perciben y diferencian el bien
y el mal, hay que tener cuidado en el
nivel de violencia que ven los niños. El espectador de escenas violentas corre
el riesgo de llegar a considerar que lo que ocurre en la ficción televisiva es
un reflejo de lo que ocurre en la vida real, entonces Gerbner (citado por
Márquez Munguía, R. A., Mireles
Contreras, G. y Armeaga Díaz, J. E., 2013) observo la cantidad de víctimas de
esas escenas, y comento que: “… podría aumentar su miedo irracional a
convertirse en una de estas víctimas de la violencia” (P.7). Yo pienso que esto
podría ser cierto en un 50%, ya que el otro 50% prefiere o intenta imitar las
escenas violentas que ve en la tv. Los niños pueden reaccionar de muchas
maneras, ya sea con miedo o por gusto por esas escenas de violencia.
Cada día la televisión ha hecho que la gente se
olvide de los libros, y la lectura, sería bueno recordar lo que el mundo de los
libros puede provocar en nuestras cabezas, nos da la posibilidad y oportunidad
de imaginar lo que leemos, pero con la televisión los libros quedaron en el
olvido y ha creado un mundo utópico diferente. Martínez (2014) comenta del gran
poder que tiene la tv sobre las personas, dice que: “…la
televisión es el medio que cuenta con mayor audiencia, pero antes de contribuir
al desarrollo cultural, social, económico y personal de sus perceptores, les
distrae de tareas más alentadoras, mientras mayor sea la educación menos se ve televisión” (p. 27). La tv ofrece muchas cosas a través de ella,
nos da lecciones de vida y cosas sobre el mundo, además de que puede mostrarnos
cosas que pocos tienen la posibilidad de ver y conocer, pero abusamos
deliberadamente de ella y nos dejamos guiar por esta.
La televisión ha
sustituido la realidad creando otra nueva. Ha creado comunidades visuales. Por
esta razón, Díaz (citado en Martínez Vega, 2014) dice que se trivializa objetos
negativos: “…figuras del mal. Violencia, horror, catástrofe, accidentes que
introducen lo real en estado bruto. La nueva religión de la sociedad
postmoderna es la televisión” (p.14). Esto podría ser razón de preocupación, la
tv ofrece mundo fantásticos, utópicos claro, pero igualmente increíbles, hace
creer a la gente que el mundo podrá ser así, pero incluyen la violencia, actos
violentos muy gráficos que pueden llegar a ser verdaderos y por eso hay que
tener cuidado con lo que vemos y cuidado con confundirlo con la realidad.
Conclusión
Con
lo descrito anteriormente podemos llegar a la conclusión, que es menester poner
la debida atención a los hijos. Todos sabemos lo mal que esta la economía
ahora, y que ambos padres salen trabajar para mantener a la familia.
El
tiempo es algo muy importante, el tiempo que se le dedica a una persona expresa
interés por ella. Todo padre sabe que cuando se tiene un niño, deberá dedicarle
todo su tiempo, compromiso y amor. Entonces si ambos padres trabajan cuando
llega el bebé, alguno debe quedarse en casa para estar con él.
Pero qué pasa
cuando ambos padres quieren seguir trabajando, ¿Con quién se queda el niño?
¿Quién atenderá las necesidades del bebé? La respuesta clásica es que se queda
con los abuelos, con alguna tía o en una guardería.
El argumento de
los padres sobre esta acusación sobre la desatención hacia el bebé, es que
quieren darle una buena vida económica, o que simplemente ahora no pueden darse
el lujo de dejar el trabajo para cuidar al niño... y aquí viene una pregunta
¿Cuál es el mejor momento para tener hijos? ¿Quién o que cuida del niño?
Bibliografía
Sánchez Granada, M. (2005). Fuentes de información bibliográfica a través
de Internet para investigadores de la educación. Lucha por la audiencia: televisión basura/educación basura. (Consultado
el 30 de enero de 2017). Disponible en http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=15825018
Piaget, J.(1959). La
formación del símbolo en el niño. México: Fondo de cultura económica.
Piaget, J. (1967). Inteligencia
y adaptación biológica. México: Fondo de cultura económica.
Wayne H. Holtzman y Isabel Reyes-Lagunes (1983). Impacto de la televisión educativa en la infancia. Francia: Unesco
Martínez, S.K. y O, J. (2014). Como afecta la televisión en el
comportamiento de los niños y niñas con atención diferencial en la primera
infancia. Dinamarca: Corporación universitaria minuto de dios uniminuto zipaquirá
cundinamarca
Universidad de Colima/Universidad de
Ixtlahuaca. (2013). Impacto de la
televisión en la formación de creencias favorables a conductas violentas en los
jóvenes. Colima: Diapasón.
Aldea Muñoz, S.
(2004). Fuentes de información bibliográficas a través de Internet para investigadores
en educación. La influencia de la “nueva
televisión” en las emociones y en la educación
de los niños. (Consultado el 6
de febrero de 2017). Disponible en: http://psiquiatriainfantil.org/numero5/tv.pdf
Sandoval Escobar, M. (2006, mayo-agosto).Universitas Psychologica. Los efectos de la televisión sobre
el comportamiento de las audiencias jóvenes desde la perspectiva de la
convergencia y de las prácticas culturales
[En línea], vol. 5, núm. 2. (Consultado
el 12 de febrero de 2017). Disponible
en: http://www.redalyc.org/pdf/647/64750202.pdf
Burgos Marrero, S.(2003). “¿Por
qué los niños se tornan violentos?” Reacción de la familia y los sistemas
sociales a su conducta. Reacción de
la familia y los sistemas sociales a su conducta. Disponible en: http://www.ramajudicial.pr/Miscel/Conferencia/PDF/14_SBurgos.pdf
Wagner, L.
(1980). Los efectos de la televisión
sobre la lectura. (trad. Condemarín M.) Disponible
en: http://www.lecturayvida.fahce.unlp.edu.ar/numeros/a3n2/03_02_Wagner.pdf
No hay comentarios:
Publicar un comentario